Cada 15 segundos un trabajador muere a causa de accidentes o enfermedades relacionadas con el trabajo y 153 trabajadores tienen un accidente laboral.
Lo anterior significa que cada día mueren 6.300 personas y más de 2,3 millones por año, y ocurren más de 317 millones de accidentes en el trabajo anualmente, muchos de estos casos resultan en absentismo laboral.
El costo de esta adversidad diaria es enorme y la carga económica de las malas prácticas de seguridad y salud se estima en un 4% del Producto Interior Bruto global de cada año de acuerdo con datos de la Organización Internacional de Trabajo (OIT).
En este sentido, Dickies, fabricante líder en ropa de trabajo, invita a las diferentes industrias a revisar sus medidas de prevención y seguridad laboral a fin de crear entornos de trabajo más sanos.
David Luna, periodista especializado en seguridad industrial, informó durante la ponencia presentada por Dickies ¨Receta para una cultura de seguridad¨, en el marco de Expo Seguridad Industrial, que Manufactura es uno de los sectores que registra el mayor número de muertes, siguiéndole Servicios.
“A pesar de que existe una cantidad de normas, procedimientos y políticas adecuadas de seguridad e higiene para proteger la vida, la salud y la integridad corporal de los trabajadores, no son suficientes por lo que deben redoblarse los esfuerzos”, opinó.
Ante este escenario, es esencial el fortalecimiento de una cultura de seguridad ya que muchas de estas tragedias pueden evitarse a través de la puesta en marcha de una sólida prevención, de la utilización de la información y de unas prácticas de inspección. De lo contrario, las organizaciones seguirán teniendo impactos directos e indirectos en la eficiencia, productividad, costos y calidad.
“La mejor manera de garantizar un medio ambiente de trabajo seguro y saludable es adoptar medidas antes de que ocurran los accidentes o surjan enfermedades”, resaltó David Luna, quien enlistó ocho ingredientes esenciales para una cultura de seguridad industrial eficaz. A continuación se describe cada uno de ellos:
1) Cumplir normatividad. Es fundamental seguir las normas y reglamentos establecidos por la organización ya que proporcionan los instrumentos esenciales para que los empleadores y los trabajadores prevean la máxima seguridad en el trabajo.
2) Incorporar tecnología. La tecnología forma parte de nuestra vida y trabajo, y actúa a nuestro favor, sin embargo suceden accidentes porque a veces el hombre no sabe lidiar con ésta. A diferencia del pasado donde las máquinas eran muy riesgosas, en la actualidad existen equipos avanzados con mecanismos de seguridad que protegen de manera adecuada al trabajador.
3) Ropa de trabajo idónea. De acuerdo a Rosa María Eseverri, Gerente de Marketing de Dickies México es importante utilizar la ropa y calzado apropiado que cumpla con los estándares y normatividades internacionales de acuerdo a los riesgos que conlleva cada industria. La ropa también tiene que cumplir con una función de máximo confort, durabilidad y protección contra condiciones peligrosas y ser adecuada a las temperaturas de cada ambiente de trabajo.
4) Asegurar la ergonomía. Muchos de los accidentes laborales y enfermedades profesionales pueden ser causados por problemas ergonómicos o dicho de otra forma por la incorrecta adaptación del trabajo a la persona. Si no se aplican los principios de la ergonomía, las herramientas, las máquinas, el equipo y los lugares de trabajo se diseñan a menudo sin tener demasiado en cuenta el hecho de que las personas tienen distintas alturas, formas y tallas, y capacidad física. Deben considerarse estas diferencias para proteger la salud y la comodidad de los trabajadores.
5) Extender el ecosistema. Toda la organización debe conocer e integrarse a las estrategias y reglas de seguridad, para convertirlos en hábitos y finalmente en una cultura. Dicha filosofía también debe compartirse con proveedores y público en general.
6) Asegurar la comunicación. La comunicación en el ámbito laboral es un tema que afecta directamente el clima de las organizaciones y, si se maneja correctamente, no solo garantiza una mayor productividad sino entornos de trabajo agradables y confiables. Las empresas deben asegurar que todos hablen el mismo idioma lo cual involucra comunicación verbal (reuniones, juntas), escrita (manuales, memorándums) y visual (cartelones, letreros, anuncios, señalamientos, etcétera).
7) Realizarlo con liderazgo. Cualquier estrategia de seguridad tiene que estar liderada por una persona capaz de comunicar ésta de manera efectiva, desarrollar sólidos sistemas y mejores prácticas, supervisar el rendimiento de los mismos y motivar al personal a participar en el aseguramiento de una buena seguridad y salud.
8) Compartir con los demás. La cultura de seguridad de la organización también debe permear a los hábitos personales y familiares, e incluso debe compartirse con las demás personas y la misma comunidad.
Fuente: méxicoxport